Encontrarse con ciertos obstáculos o situaciones puede dejarlo a uno asustado, como tener miedo a la oscuridad, las alturas o los animales. La mayoría de nosotros somos capaces de mantener la calma, racionalizar la situación y encontrar una forma de evitarla, pero esto no funciona para todos. Según el Instituto Nacional de Salud Mental, más de 10 millones de adultos viven con algún tipo de fobia. ¿Qué es una fobia? Las fobias, según la Asociación Estadounidense de Psicología, son miedos intensos que provocan angustia y pueden ser intrusivos. Las personas con este trastorno de ansiedad tienen un miedo irracional a cosas que no representan una amenaza real.
A continuación, se muestran algunos ejemplos de fobias comunes:
- Aracnofobia, que es el miedo a las arañas.
- Acrofobia, este es el miedo a las alturas
- Agorafobia, que es el miedo a estar en una situación de la que no puedes escapar.
La Asociación Estadounidense de Psiquiatría simplificó los síntomas en dos puntos:
- Una reacción desproporcionada, así como la edad que juega un papel en ser inapropiada.
- La capacidad del individuo para comportarse normalmente se ve comprometida.
Opciones de tratamiento A diferencia de los trastornos de ansiedad, como el trastorno obsesivo compulsivo, no se ha completado una investigación extensa sobre las fobias, pero eso no ha impedido que los profesionales de la salud mental encuentran formas de ayudar a los pacientes.
- Los terapeutas ayudan a tratar las fobias mediante el uso de la psicoterapia, también conocida como terapia de conversación. Los pacientes reciben TCC (terapia cognitivo-conductual), donde pueden aprender a pensar, reaccionar y comportarse ante cualquier cosa que teman. Está destinado a reducir la sensación de ansiedad abrumadora.
- Los medicamentos, por otro lado, no son una cura, pero ayudan a los pacientes a lidiar con los síntomas.
- Las personas también pueden aprender técnicas para controlar el estrés, como la meditación, el yoga u otros enfoques holísticos.
Si bien uno de estos métodos puede funcionar para algunos, los profesionales pueden proporcionar a sus pacientes una combinación de estos tratamientos y remedios. Desafortunadamente, se desconoce la causa del trastorno de ansiedad. Puede deberse a la genética, el medio ambiente o incluso al desarrollo. Pero hasta entonces, las personas que padecen fobias deben buscar ayuda.